A mi amigo Sergio:
Ahora que las plumas
aún no han llegado al suelo…
El reloj de mi habitación sigue parado
y tu voz pausada ausente.
No tus silencios pensativos
que siguen estrellándose en mi recuerdo.
Ahora borro tu mail,
Ahora borro tu teléfono.
Ahorra borro mis lágrimas
No tus palabras
con las que hacías malabares de letras
de colores,
de paisajes
de épocas
Eterno viajero acróbata de silabas
Sé que sigues cerca…
tan cerca
que aún siento tu vuelo…
Por favor:
no dejemos que las plumas
lleguen al suelo.
Mikel Varas
Ahora que las plumas
aún no han llegado al suelo…
El reloj de mi habitación sigue parado
y tu voz pausada ausente.
No tus silencios pensativos
que siguen estrellándose en mi recuerdo.
Ahora borro tu mail,
Ahora borro tu teléfono.
Ahorra borro mis lágrimas
No tus palabras
con las que hacías malabares de letras
de colores,
de paisajes
de épocas
Eterno viajero acróbata de silabas
Sé que sigues cerca…
tan cerca
que aún siento tu vuelo…
Por favor:
no dejemos que las plumas
lleguen al suelo.
Mikel Varas
5 comentarios:
Que hondamente le describes, Mikel. El te queria y admiraba muchísimo.
Las plumas jamás llegarán al suelo.
Un abrazo
Es precioso Mikel. Acabas de esculpir un gran poema forjado por sentimeintos de mutua admiracion y respeto. Sergio se sentia muy orgulloso de ti.
Precioso Mikel, precioso. Las plumas no llegaran al suelo mientras mantengamos viva la esperanza de su recuerdo.
Las plumas nunca llegarán al suelo.
Su voz está, por siempre ya, de vuelo.
Uno de los poemas mas emotivos que he leido en mucho, mucho tiempo. Mikel, te has superado. Sergio se hubiese sentido tocado en los mas hondo del corazon.
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