domingo, 23 de octubre de 2011

Un poema de Julio González Alonso

Coplas
a lo que en la vida importa.


Si del pasar de la vida
nos damos apenas cuenta,
ni advertimos
que su paso es una herida
que sin que el cuerpo la sienta
recibimos,

aún somos menos conscientes
de lo que la vida llena
de sentido,
y amigos, amor, parientes,
damos sin más a la pena
del olvido.

Y haciendo de tal manera
nada nos será en provecho,
de tal suerte
que cuanto está a nuestra vera
arrojamos en el lecho
de la muerte.

Perseguir aplauso y gloria
es empresa fatigosa
para el alma
y en las vueltas de esa noria
no encuentras paz provechosa
ni la calma.

Y a la postre, ya en la cuenta
de todo el tiempo perdido
sin remedio,
verás que toda tu renta
será un corazón partido
por su medio.

Huye de la gloria inútil
que enreda tu sentimiento
de tal modo
que todo lo vuelve fútil
sin hallar lugar, ni asiento,
ni acomodo.

Y en la soledad escucha
tu alma hablar con mesura
lo que sientes,
y abandonado a esta lucha
será tu voz cual frescura
de las fuentes.

Verás que no cabe gozo
mayor, ni mayor sorpresa
si riendo
hallas el sano alborozo
del vino y pan en la mesa
compartiendo.

Que al fin lo que más importa
de ser feliz no es la fama
ni la gloria,
sino en esta vida corta
amar con quien bien te ama
es la historia.


Julio G. Alonso

3 comentarios:

perfecto herrera ramos dijo...

Es un placer encontrar la poesía de Julio por este mundo del ciberespacio, muy especialmente en este blog.
Siempre encontramos en Julio, la maestría del poeta que conoce su oficio y al artista que ofrece la sabiduría y la belleza como descarnado bien del espíritu.
Mi enhorabuena a ambos.

Un abrazo.

Octavio dijo...

Julio, me imagino a Jorge Manrique revolviéndose en su tumba y mordiéndose las uñas de envidia.
Enhorabuena y un abrazo.

Julio dijo...

Caros amigos en la poesía, Perfecto y Octavio:

Os agradezco de todo corazón las generosas palabras y el sentimiento con que adornáis estas manriqueñas en este cuaderno bajo el auspicio del nombre del poeta bilbaino Blas de Otero. Una enorme felicidad saberos cerca, amigos. Con un abrazo.
Salud